Este deportista latino hetero no estaba seguro de querer masturbarse delante de la cámara, ¡y habría sido una pena dado el cuerpazo de loco que tiene! El director lo excita con una revista. Ante la vista de las fotos de sexo, el tío se siente atraído y empieza a empalmarse. Sus impulsos exhibicionistas acaban por dominarlo y se vuelve completamente impúdico, lanzándose a una tórrida y jugosa paja.