Alberto Fuentes es magnífico. El antillano con cara de ángel está colgado como un caballo (9,5 pulgadas). Frente a él está Pascoal Coelho: guapo, sexy, con un culo para morirse. Parece una pareja hecha en el cielo. Este es probablemente el tipo de polvo con el que todos sueñan por la noche.