"Soy un árabe guapísimo. Soy joven, seguro de mí mismo, arrogante. Si estuvieras conmigo te arrodillarías delante de mí, me olerías el pubis mientras te empalarías en mi polla y la garganta profunda. Adorarías mis huevos, admirarías mi pecho, me mirarías a los ojos y me suplicarías que te follara el culo". Esto es lo que parece decirnos Brahim mientras se exhibe ante la cámara.